El proyecto ADAPT sigue avanzando en la búsqueda de variedades de patata que se adapten mejor a la sequía y las olas de calor
El proyecto de la UE Horizonte 2020 Accelerated Development of multiple-stress tolerAnt PoTato (ADAPT), en el que participa Europatat, tiene como objetivo desarrollar nuevas estrategias para que las patatas sean aptas para las difíciles condiciones agronómicas del futuro.
Las investigaciones han llegado a su fase final y en marzo de 2023 se llevará a cabo una nueva ronda de fenotipado automatizado de alto rendimiento con dos variedades seleccionadas. Este trabajo se realizará en las instalaciones del desarrollador de tecnología de cribado Photon Systems Instruments en Brno (Chequia). Partiendo de plántulas cultivadas en tejidos, las variedades Desirée y Lady Rosetta se cultivarán en suelo en condiciones ambientales estrictamente controladas. Estas dos variedades se seleccionaron a partir de los ensayos de campo previos que se han llevado a cabo en el consorcio durante los dos últimos años en España, los Países Bajos y Austria. Además, los ensayos en invernadero realizados en las universidades de Erlangen, Utrecht y Wageningen mostraron niveles contrastados de tolerancia a los dos estreses diferentes estudiados por ADAPT: estrés por calor y sequía, así como anegamiento (tanto a nivel individual como en combinación, lo que es más realista en vista del cambio climático).
En la primera fase mejoramos el montaje experimental, por ejemplo en lo que respecta a la intensidad y duración de los tratamientos de estrés y al mejor momento para el muestreo. A partir de los datos obtenidos hasta ahora, podemos estudiar con gran detalle estos procesos en dos variedades de patata contrastadas y combinar el fenotipado automatizado con un análisis detallado de las respuestas morfológicas y fisiológicas a diferentes estreses. Además, también se medirán y analizarán en red los cambios bioquímicos y moleculares en respuesta a estreses individuales y combinados, para comprender cómo se aclimatan las plantas de patata a estos estreses y por qué algunas variedades lo hacen mejor que otras.
Para ello, los investigadores de ADAPT volverán a tomar una serie de muestras en momentos críticos del experimento, que luego se analizarán mediante múltiples enfoques ómicos. En las Universidades de Erlangen y Viena, los investigadores de ADAPT seguirán los cambios en el proteoma y el metaboloma, y en Olomouc se medirán las fitohormonas vegetales, mientras que en el Instituto Nacional de Biología (NIB) de Liubliana se controlarán los cambios en la expresión génica.
La posterior integración de todos estos datos se utilizará para actualizar los modelos de respuesta al estrés construidos por el equipo del NIB a partir de datos anteriores y de los resultados recientes del proyecto ADAPT. Este conjunto de datos se recopila en el Mapa de Conocimiento del Estrés generado por el equipo del NIB como parte del proyecto. Este análisis de la red ayudará a identificar los nodos críticos para la aclimatación a múltiples estreses, que luego se utilizarán para el desarrollo de marcadores para la obtención de variedades de patata más tolerantes en el futuro.