Ignacio González, presidente de AECOC: " La inflación alimentaria crecerá por debajo de la general, lo peor ya ha pasado”
El presidente de AECOC, Ignacio González, en la inauguración del 39º Congreso AECOC de Gran Consumo, ha querido mandar un mensaje de optimismo, vaticinando que “la inflación alimentaria crecerá por debajo de la general, por lo que podemos afirmar que lo peor ya ha pasado.” Ignacio González ha argumentado que “el PIB ha crecido un 0,8 en el segundo trimestre del 2024, lo que implica un crecimiento interanual del 3,1%, que sitúa a España con una mejor evolución que países como Italia, Francia o Alemania. Este crecimiento se ha visto sustentado por el gasto público y por un sector exterior fuerte gracias a las exportaciones, que han crecido un 11%. A día de hoy, contamos con un IPC del 1,1% y un IPC alimentario del 1,8%, el más bajo en tres años. La inflación alimentaria se sitúa ya por debajo de la general, tendiendo a cero. Esto propicia un entorno económico de moderado optimismo, marcado por la recuperación del consumo privado, un buen comportamiento del mercado laboral, el crecimiento de la población, el impulso del sector turístico y una razonable situación financiera de los hogares.”
A la hora de ahondar entre los elementos que han propiciado este contexto económico, Ignacio González, ha explicado que “el mercado laboral sigue mostrando fortaleza: el número de afiliados ha aumentado en 350.000 en 2024 y la tasa de paro ha descendido hasta el 11,3%. Por otro lado, la población española crece un 1,1% respecto 2023 gracias a la inmigración, llegando a los 48,6 millones de españoles. El turismo vuelve a batir récords y se estima que en 2024 llegarán en torno a 96 millones de turistas. Este sector sigue siendo capital para nuestra economía, pues aporta el 12% del PIB. Por último, la situación de las familias ha mejorado y la tasa de ahorro y la renta bruta disponible de los hogares aumenta.”
Pese a este favorable entorno económico, Ignacio González ha querido alertar de algunas amenazas que podrían perturbar la estabilidad y el optimismo que vivimos “la inestabilidad geopolítica con los conflictos que están teniendo lugar en todo el mundo, podría tener impacto en el funcionamiento de la cadena de valor. Además, para el consumo, no hay nada peor que la incertidumbre”.
El presidente de la Asociación de Empresas de Gran Consumo ha querido advertir también de algunos elementos de riesgo, señalando “la presión fiscal, un marco regulatorio muy exigente y el absentismo laboral” como los grandes elementos que lastran la competitividad y la productividad de las empresas españolas. En este sentido, Ignacio González ha alertado sobre el hecho de que, la presión regulatoria a la que se está sometiendo a las compañías españolas, -hasta un 36% superior en comparación con la UE- está ejerciendo de freno a la competitividad y que, por ello, es primordial favorecer un modelo de legislación competitiva para que España no se vea superada por otros mercados.
Respecto al absentismo laboral, Ignacio González, ha apuntado que es un factor que perjudica seriamente a la productividad, ya que hasta 1,3 millones de personas faltan a sus puestos de trabajo cada día, un 7,2% de la población activa española. Estas cifras exigen una reflexión de país como mínimo al mismo nivel que el de la reducción de la jornada laboral ya que “es como si toda Galicia se ausentara en su jornada laboral”. Como sector, ha declarado “estamos dispuestos a participar en un debate global sobre el futuro del empleo, pero no creemos conveniente atacar los problemas parcialmente, de forma simplificada.”
Además de la lucha contra el absentismo, el presidente de AECOC, considera clave para la mejora de la productividad, actualmente un lastre en España, “la formación, la innovación y digitalización y la inversión.”
Finalmente, Ignacio González, ha expuesto los seis compromisos que el sector del Gran Consumo ha de adquirir en un futuro próximo “Primero de todo es imprescindible escuchar al consumidor y responder eficazmente a sus necesidades pues, si no, nuestros más de 14 millones de consumidores diarios, perderán la confianza en nosotros. También tenemos que mejorar nuestra eficiencia, sentirnos y actuar como sector todos unidos y en colaboración pues, nuestros mejores éxitos siempre han venido cuando hemos actuado juntos. El tercer compromiso que debemos adquirir es el de construir y favorecer un modelo d legislación competitiva en Europa y en España. El legislador ha de dejarse aconsejar por los que conocemos el terreno. Por otro lado, hay que hacer sostenible la sostenibilidad, para que esta sea compatible con el desarrollo económico y la inversión y no se convierta en un freno a la competitividad. Sino lo hacemos así, corremos el riesgo de que las empresas dejen de actuar por compromiso y lo hagan por puro cumplimiento normativo. Asimismo, es necesario impulsar un mercado laboral competitivo y, para poder hacerlo, es necesaria una visión integral donde todas las cuestiones y problemáticas tengan cabida. Finalmente, no podemos olvidar el proceso tecnológico en el que nos vemos inmersos. Hay que aprovechar la tecnología como vector de crecimiento pues, el 70% de valor económico futuro estará ligado a la digitalización. No podemos desaprovechar la ola tecnológica”.