Pasar al contenido principal

ASAJA Alicante denuncia que el Trasvase Tajo-Segura no entra en los planes de futuro de la política hídrica del Gobierno

El Museo de Arte Contemporáneo de Alicante (MACA) acogió ayer y hoy una jornada en la que se ha analizado el futuro del agua en nuestro país y, especialmente en el Mediterráneo, y en la que ha participado la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera y el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, entre otros. Una jornada en la que, una vez más, Ribera ha dejado claro que en sus futuras políticas hídricas el Trasvase Tajo-Segura tiene la condena asegurada, tras afirmar que las desviaciones de agua a través del acueducto deberán adaptarse al nuevo escenario climático que dibuja el Ministerio, en el que ha estimado una disminución disponibilidad de caudales de los ríos de alrededor de un 40% para 2050. 

Dicho esto y, requiriendo la ministra en dicha jornada la necesidad de un tono conciliador que, según Ribera, todos los representantes políticos debieran tener cuando se refieren a una cuestión tan sensible como el tema hídrico en la provincia, desde ASAJA Alicante opinamos que ya es hora de desenmascarar a este Gobierno socialista y dejar claro que desde Transición Ecológica nunca se ha abordado el problema hídrico del sureste con “máximo diálogo, comprensión y empatía para todos los sectores”, sino con imposición, unilateralidad y  sectarismo.

“Quizás Teresa Ribera sí tenga la comprensión y empatía del presidente de la Generalitat, Ximo Puig, pero, desde luego, no la tiene de nadie más en Alicante, Murcia y Almería, donde siempre ha actuado contra los regantes a golpe de imposiciones y sin contar con ninguno de los sectores productivos para llevar a cabo su hoja de ruta de sustituir el agua de los ríos por agua desalada. Asimismo, es difícil que le mostremos empatía y tengamos tono conciliador mientras ella decreta la desaparición de la agricultura mediterránea”, denuncia el presidente de ASAJA Alicante, José Vicente Andreu. 

Respecto a la jornada sobre el futuro del agua que concluye hoy, el presidente de ASAJA afirma que “esta ministra, que tanta gala hace del diálogo, es la primera que con sus políticas nos ha negado el presente a los alicantinos con su tesis expuesta en este foro, en el que se ha referido explícitamente a dar prioridad a las políticas ambientales y al uso ambiental del recurso hídrico, olvidando por completo en su planificación la atención a las demandas, tanto agrícolas como domésticas, y olvidando la planificación hidrológica actual tan necesaria en nuestro país. 

En opinión de ASAJA Alicante, si nos encontramos ante un escenario de cambio climático con episodios más severos de sequías pero, también, de lluvias torrenciales e inundaciones, no entendemos como la nueva planificación hidrológica de este Gobierno no apuesta y criminaliza obras tan básicas como los embalses, los trasvases o la modernización de los regadíos, porque lo más lógico es que ante un escenario como el que nos movemos, de fenómenos meteorológicos cada vez más extremos, cuanto más reguladas tenga sus cuencas un territorio más y mejor podrá enfrentarse con seguridad a los efectos del cambio climático. 

Por su parte, el papel en este foro sobre el futuro del agua del president de la GVA, Ximo Puig, también ha destacado por volver a desaprovechar una vez más la oportunidad de reivindicar una infraestructura imprescindible para la provincia de Alicante frente a la ministra. “Puig ha vuelto a ejercer de político gris con su tono de ‘buenismo´ frente al inmovilismo ecologista de Ribera. Es por ello que debo decir que el president nos ha hecho sentir vergüenza con su actitud dócil y sumisa y su falta de entereza e integridad como político frente a Teresa Ribera en una oportunidad de oro para plantarle cara, con todos los sectores productivos alicantinos de su lado y deseosos de ver en él un punto de inflexión y una defensa acérrima al Tajo-Segura”.

Asimismo, y en referencia al reiterado comentario por parte de los miembros del Gobierno socialista de “guerra del agua”, desde ASAJA Alicante queremos hacerles saber que nosotros solo pedimos que una infraestructura que lleva funcionando 42 años, cuyo Memorándum fue fruto de un gran acuerdo entre todos los partidos políticos de España y de diferentes territorios, no se aniquile en una legislatura y aprovechando la coyuntura del cambio climático, pues pensamos que se está utilizando como coartada para poner en marcha medidas y actuaciones disparatadas e innecesarias, como el hecho de que “si por el cambio climático los ríos tendrán menos agua de forma natural, no entendemos porque este Gobierno quiere darles de forma artificial más agua al incrementar los caudales ecológicos”, lamenta Andreu.  

En su visita a Alicante, la ministra Teresa Ribera ha dejado patente una vez más que con sus políticas de agua va a dejar a mucha gente atrás, pero siempre sin anunciar tajantemente el final del acueducto. “Ribera no habla de acabar con el Trasvase Tajo-Segura, porque tres comunidades enteras se le echarían encima y porque seguramente el acueducto se quedará para uso doméstico. Pero, lo que está claro, es que con su hoja de ruta sí lo aniquilará para el uso agrícola. Y en esa ambigüedad es en la que Ribera juega con la opinión social y se parapeta en la excusa de que no es el final del acueducto. Por su puesto, con sus planes perderemos muchos puestos de trabajo y, lo que es más grave, nuestra independencia agroalimentaria, pasando a depender de terceros países. Desde ASAJA Alicante reiteramos que el reto del futuro es mantener el equilibrio entre medio ambiente y los distintos usos del recurso que precisamos como sociedad. Es decir, proteger el medio ambiente si, pero no perdiendo puestos de trabajo ni nuestra independencia alimentaria, acabando con la Huerta de Europa y dejando atrás al Levante español. Acción climática y mantenimiento de puestos de trabajo y bienestar, o nada. No habrá solución viable y con éxito si no sale del consenso de todas las partes. Las soluciones impuestas, tal y como está haciendo el actual Gobierno de España, serán un rotundo fracaso como lo fue el Plan Agua de Cristina Narbona”, concluye el presidente de ASAJA.