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Siete de cada diez ciudadanos afirman que consumen habitualmente alimentos ecológicos, más de siete puntos por encima del año pasado

En conjunto, siete de cada diez ciudadanos afirman ser consumidores habituales de alimentos ecológicos (69,7%). Específicamente, el 63,3% de los ciudadanos afirman que consumen alimentos ecológicos sin elaborar y el 56,0% elaborados, según el último Informe de Opinión Pública (IOP) de Simple Lógica.

En la actualidad, el consumo de los llamados “alimentos ecológicos” es un fenómeno social que tiene como trasfondo la adaptación de los hábitos alimenticios para evitar los modelos de producción más nocivos con el medioambiente.

Simple Lógica abordó este asunto en 2019 por primera vez, consultando a una muestra representativa de la población sobre el consumo de este tipo de alimentos y la percepción de sus beneficios. En la actualidad lo ha retomado para comprobar la evolución interanual de los indicadores.

 
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El porcentaje de ciudadanos que afirman que en su domicilio consumen habitualmente alimentos ecológicos sin elaborar, tales como frutas, verduras, etc., aumenta más de 10 puntos porcentuales, pasando del 53,3% registrado en 2019 al 63,7% en la actualidad, mientras que el 35,9% afirman que no, porcentaje que disminuye en similar proporción.

Por otro lado, el 56,0% de los ciudadanos indican que consumen alimentos ecológicos elaborados, como conservas, aceites, leche, vinos, etc., porcentaje que aumenta casi ocho puntos con respecto al año anterior, mientras que el 43,0% declaran que no, porcentaje que disminuye 7,3 puntos.

 
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Tomando a los consumidores de una u otra modalidad en su conjunto, representan un 69,7% del total de los ciudadanos, los consumidores de alimentos ecológicos. Este porcentaje aumenta 7,3 puntos con respecto al registrado en 2019.

Entre los consumidores de alimentos ecológicos, la mayoría consumen indistintamente alimentos sin elaborar y elaborados (71,7%), porcentaje que aumenta 9,3 puntos en relación al año pasado.

Por su parte, el 19,1% afirman que consumen alimentos sin elaborar, pero no los consumen elaborados. Mientras que el 8,6% los consumen elaborados, pero no sin elaborar. Como ocurriera en la consulta anterior, se observa un mayor consumo exclusivo de alimentos ecológicos sin elaborar, que de alimentos ecológicos elaborados. No obstante, en ambos casos el porcentaje se reduce, en favor de quienes consumen indistintamente los dos.

 
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En función del sexo, no se observan diferencias significativas.

Atendiendo a la edad, existe una clara relación indirecta: a más edad, menos consumidores de alimentos ecológicos. Así, entre quienes tienen de 16 a 24 años se registra un porcentaje de consumidores del 80,2% y del 77,1% entre quienes tienen de 25 a 44 años, todos significativamente superiores al 69,7% registrado entre el total y a los registrados entre los segmentos de más edad. De hecho, entre los mayores de 65 años se registra un porcentaje de consumidores (55,0%) que es también significativamente inferior al registrado entre el total (69,7%).

También existen diferencias claras y significativas cuando atendemos al estatus social. De manera que, entre quienes tienen un estatus alto o medio alto, se registra un porcentaje de consumidores de alimentos ecológicos (80,7%) que es significativamente superior al registrado entre quienes tienen un estatus menor (≤69,0%). Además, entre quienes pertenecen a estatus medio bajo o bajo se registra un porcentaje (58,5%) que además es significativamente inferior al 69,7% total.

Según el tamaño de hábitat, el porcentaje de consumidores de alimentos ecológicos en las pequeñas ciudades (74,6%) es significativamente superior al 69,7% registrado entre el total y al 64,4% registrado entre las grandes ciudades.

Por último, entre las Comunidades Autónomas, se observa que el porcentaje de consumidores registrado en Madrid (62,3%) es significativamente inferior al 69,7% que se registra en total. El mayor porcentaje de consumidores se registra en Galicia (77,9%) porcentaje que es significativamente superior al 62,3% registrado en Madrid.

Casi mitad de los ciudadanos creen que los beneficios directos o indirectos de los alimentos ecológicos compensan el mayor precio en este tipo de productos (46,6%), porcentaje que disminuye 2,2 puntos con respecto al año anterior.

El otro aspecto sobre el que se consultó a la ciudadanía fue la relación entre los beneficios de los alimentos ecológicos y el precio de estos productos.

 
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En efecto, representan algo menos de la mitad los ciudadanos que creen que los beneficios de los alimentos ecológicos compensan el mayor precio (46,6%), mientras que un 42,4% aseguran que los beneficios no compensan ese mayor precio y un 11,0% no se definen en este punto, lo que refleja cierto desconocimiento de los efectos en esa relación.

Con respecto al año anterior, desciende 2,2 puntos el porcentaje de quienes ven compensado el precio con los beneficios, mientras que aumenta 5,1 puntos el porcentaje de quienes no consideran que se produzca esa compensación.

 
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No existen diferencias significativas en función del sexo, el tamaño de hábitat o entre distintas comunidades autónomas en este caso. Sin embargo, cuando se atiende a la edad y a la clase social, se observan diferencias que apuntan en la línea de las observadas en la pregunta anterior.

Así, el porcentaje de quienes creen que los beneficios de los alimentos ecológicos compensan el mayor precio de los productos, entre quienes tienen de 16 a 44 años (≥52,6%) y entre quienes son de clase social medio-alta o alta (52,6%) son significativamente superiores al 46,6% registrado entre el total. El porcentaje de quienes así opinan va descendiendo a medida que aumenta la edad y disminuye el estatus, registrándose entre los mayores de 65 años (31,3%) y entre quienes tienen un estatus social bajo o medio bajo (35,8%) un porcentaje que es significativamente inferior al del total.

Por último, la opinión de que los beneficios de los alimentos ecológicos compensan el mayor precio de estos productos, es significativamente superior entre los consumidores (56,6%) que entre los no consumidores (23,8%) y también con respecto al total (46,6%). Mientras que entre los no consumidores destacan significativamente quienes sustentan la opinión contraria (57,3%) con respecto al porcentaje registrado entre los consumidores (35,9%) y también con respecto al 42,4% registrado entre el total.