La falta de lluvias retrasa la siembra del cereal
* Patricio Simó.
La falta de lluvias está haciendo que muchos agricultores retrasen la siembra del cereal. No hay previsión de que llueva en los próximos días, con lo cual la situación se puede agravar aún más. Si no llueve, sembrar en estas condiciones es muy arriesgado. Hay, sin embargo, quien está sembrando en seco. La siembra en seco consiste en depositar las semillas en la tierra sin condiciones de humedad para que no germine a la espera de que llueva. El problema es si nace la planta y no llueve después. Hay también quien siembra sin tirar abono y luego si el tiempo acompaña echan urea al voleo.
En la finca hay un campo de viña que he tenido que arrancar porque se secaban las plantas y ahora mismo me estoy planteando si sembrar o dejarlo en barbecho para que descanse la tierra. Sembrar supone muchos gastos. Al haber habido viña antes no basta con labrar con el cultivador. Hay que pasar los topos, aunque lo suyo sería hacer un desfonde, pero al precio que está el gasoil uno se lo tiene que pensar dos veces antes de subirse al tractor.
El desabastecimiento de trigo como consecuencia de la guerra en Ucrania y la grave sequía, unido a la escasez de cosecha en los principales países productores como Ucrania ha hecho que el precio de los cereales haya aumentado sensiblemente, pero llevaba años en los que prácticamente el precio era el mismo.
Por el contrario, lo costes de producción se han disparado exponencialmente. El abono está cerca del euro el kilo, cuando hace solo unos años costaba la mitad y lo mismo pasa con el gasoil agrícola. Para sembrar una hectárea de cereal se necesitan alrededor de 300 kilos de abono. Poner en marcha el tractor cuesta dinero. Las cuentas no salen.
