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Los ingenieros agrónomos reivindican sus competencias también en bienestar animal

El Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos y la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos consideran que el “bienestar” de los animales criados en nuestras granjas es mucho mas que la sanidad animal.

Mediante un comunicado, el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos -del que forma parte el COIAL- y la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos quieren dejar clara la competencia de los Ingenieros Agrónomos en el bienestar animal dentro del ámbito de las explotaciones ganaderas y que la pretensión de exclusividad exhibida en una nota reciente del Colegio de Veterinarios no se adecua al escenario competencial de las profesiones que intervienen en dicho campo.

Se incide en el hecho de que restringir la garantía del bienestar a las condiciones sanitarias de los animales es una visión limitada del complejo sistema en el que se basa el bienestar de nuestros animales.

Hay recordar -señalan- que las bases biológicas y tecnológicas para la producción animal que incorpora, desde su creación, los estudios de ingeniería agronómica, tratan con especial énfasis los criterios de diseño conducentes a garantizar un ambiente en el que los animales puedan desarrollarse con las máximas condiciones de bienestar que preconizan las normas europeas. De esta forma, diseñar sistemas de suministro de agua y ración que garanticen la alimentación de los animales en cantidad, calidad y seguridad; prever las condiciones ambientales para su confort térmico y ambiental; establecer los sistemas de manejo que eviten su estrés o proyectar los espacios compatibles con su comportamiento etológico, son cuestiones básicas que los ingenieros agrónomos incorporar a su labor diaria en el sector ganadero. Por ello, si los ingenieros agrónomos son los profesionales responsables de garantizar estas cuestiones en la concepción del alojamiento ganadero, serán igualmente competentes de controlar su cumplimiento.

De esta forma, el bienestar animal no se sustenta sólo sobre el pilar sanitario, sino que descansa en otros principios que requieren la aplicación de tecnologías específicas propias de la ingeniería agronómica.

En el ámbito de los animales de producción, y en lo que hace referencia a la protección de su bienestar, la idoneidad de nuestra profesión no está en discusión y está amparada por la normativa vigente y unánime jurisprudencia. Por ello no entendemos -comentan- afirmaciones que abran polémicas estériles y que puedan confundir a los consumidores, llegando incluso a distorsionar la libre competencia.