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El seguro de uva de mesa volverá a subir el próximo año

El sector de la uva de mesa sigue recibiendo malas noticias y hoy Agroseguro  ha confirmado que va a proceder a una nueva subida, pendiente del pasado año, del coste del seguro de uva de mesa cifrada en más de un 9% y que se suma a la del 10% de este año.

LA UNIÓ considera que la elevación de las primas este año ya duplicaba el coste del seguro, con esta nueva sería totalmente inasumible para los productores y haría muy inviable su contratación. Si este año las cifras de contratación ya han bajado más de un 35%, para el próximo la cuantía será superior. En el caso de que no se modifique este brutal incremento del coste de la póliza de la uva de mesa la organización dice que estudiará la posible convocatoria de acciones de protesta. Antes, trasladará inmediatamente su malestar y queja ante la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (ENESA) y Agroseguro y también solicitará una reunión urgente con la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, para trasladarle esta problemática y buscar alternativas.

Precisamente, la consellera Mollà anunció -según afirma la organización agraria- en una reunión celebrada el pasado mes de octubre en Monforte del Cid con alcaldes y sector de la comarca que iba a buscar un frente común para hacer que Agroseguro recobrara los precios y coberturas de 2018 y que plantearía en la Conferencia Sectorial de Agricultura retornar a la situación de partida del pasado año. Lejos de solucionarlo, la realidad es que la Conselleria de Agricultura ha empeorado la situación en la que queda el seguro de uva de mesa. Para el próximo año ha decidido retirar la subvención adicional que otorgaba desde hace tiempo a todas las producciones acogidas a una denominación de origen, incluida claro está la de la DO de la Uva Embolsada del Vinalopó.

LA UNIÓ ha propuesto en reiteradas ocasiones a la Conselleria de Agricultura que complemente la subvención hasta el máximo permitido por la UE y por la transposición estatal de dicha normativa (65% del recibo de prima) para las personas profesionales de éste y otros cultivos, puesto que son ellas las que más acusan los daños por inclemencias meteorológicas al depender su renta en mayor proporción de los ingresos procedentes de las actividades agrarias. Además, esta organización profesional agraria propone que los recargos por siniestralidad sean subvencionables, porque los siniestros no dependen de la voluntad de la persona agricultora.

La organización agraria indica que es evidente que el seguro de uva de mesa presenta una alta siniestralidad en el transcurso de los últimos años, pero también hay que significar que el cambio climático es evidente y que por las características en las que se produce este cultivo existe un mayor riesgo climatológico en esas fechas (más lluvias fundamentalmente) y que debe haber un equilibrio entre las líneas más rentables y las que menos. Por ello hace un llamamiento a las Administraciones públicas para que ayuden a los productores en la viabilidad del seguro de uva de mesa, que es la única herramienta de estabilidad de su renta ante las inclemencias meteorológicas.