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El lobby agrario valenciano en Bruselas sigue parado un año después de su anuncio

El prometido lobby agrario de la Comunitat Valenciana para defender los intereses de la agricultura de la Comunitat Valenciana ante las instituciones comunitarias sigue sin ponerse en marcha un año después que la Generalitat lo anunciara.

El 3 de diciembre del pasado año LA UNIÓ, dentro de sus medidas para paliar la desastrosa campaña citrícola, reclamaba a la Generalitat un lobby permanente en Bruselas para defender los intereses en defensa del sector agrario valenciano. Al día siguiente, tras una reunión, responsables de la Conselleria de Agricultura y el conjunto del sector citrícola, hacían suyas las propuestas de LA UNIÓ y la incluían dentro de un plan de la citricultura valenciana. Posteriormente, desde la Generalitat, y por mediación incluso del propio president de la Generalitat Ximo Puig, se ha prometido y anunciado en reiteradas ocasiones ese lobby.

Transcurrido ya un año sin noticias, el secretario general de la organización, Carles Peris, ha recordado que “en momentos de crisis nuestros gobernantes aprovechan para realizar promesas que luego no se cumplen como es el caso de este lobby, pero también por ejemplo el anunciado paquete de ayudas por valor de 8 millones de euros como consecuencia de la crisis citrícola de la pasada campaña que no han recibido los citricultores ni recibirán finalmente”. Peris indica que “no se cumplen y dejan patente la falta de agilidad de las diversas Administraciones para dar respuesta a las demandas de la sociedad, en este caso las de las personas agricultoras y ganaderas de la Comunitat Valenciana”.

El secretario general de LA UNIÓ añade que “estamos en un momento crucial, con una reforma de la PAC que afecta de lleno a los sectores agrarios valencianos y que es una herramienta clave para las personas profesionales de la agricultura y ganadería valencianas. A ello se le suman las medidas que se derivarán del conocido Green Deal (Acuerdo Verde) que liderará el vicepresidente ejecutivo de la Comisión Europea, Frans Timmermans, que supondrán una profunda renovación medioambientalista en la Unión Europea y en la que el sector agrario valenciano tiene mucho que decir. Por otra parte, la Comisión Europea está permanentemente negociando acuerdos internacionales de comercio que ya vemos como afectan al sector agrario. Ante todos estos cambios la Comunitat Valenciana no puede quedarse al margen y el sector profesional agrario precisa de una interlocución continua y una defensa de sus postulados en la capital comunitaria”.

Pese a todo la organización indica que todavía se está a tiempo de consolidar ese lobby puesto que estos retos de futuro que esperan al campo valenciano en las directrices de la política europea son cada vez más relevantes y requieren de actuaciones decididas y eficaces. En este sentido, considera que la Oficina de la Comunitat Valenciana en Bruselas dispone de un buen personal técnico que realiza una labor destacada que hay que agradecer, pero paralelamente al refuerzo de su trabajo, según Carles Peris, hay que “apostar por un liderazgo político que abra puertas en Bruselas, que tenga contacto permanente con la Comisión Europea, Parlamento Europeo y con el resto de las instituciones comunitarias para que canalice conjuntamente con el sector agrario valenciano todas las demandas y líneas de trabajo para que estemos mejor defendidos y se escuche en la Unión Europea la voz de las personas profesionales del campo valenciano”.