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La Red de Municipios por la Agroecología presenta su nueva imagen dedicada a pequeños municipios

Desde que en 2017 se constituyó la Red de Ciudades Por la Agroecología con el impulso de grandes municipios como Zaragoza y València esta plataforma ha seguido creciendo estos 5 años hasta aunar a más de 25 municipios y ser una referencia en el territorio. “A pesar de que las políticas alimentarias son aplicables a todas las escalas, las dinámicas diferentes de los municipios urbanos y los más rurales ha hecho que desde 2019 se esté trabajando específicamente con los municipios más pequeños y se haya decidido incluso cambiar el nombre” añade Jorge Molero, el actual coordinador de la Red de Municipios.

“Queremos subrayar que estas políticas fomentan el empleo local, fijan más población, los recursos se quedan en la zona u se protege el medioambiente“ insiste Molero. Marijo Imaz Gurrutxaga, técnica del Ayuntamiento de Orduña explica que en este municipio pequeño “apostamos por productores locales y apoyar toda la cadena de valor, por ejemplo, estamos desde el ayuntamiento el desarrollo de un centro de transformación cárnica y se les está acompañando en todo el proyecto, para nosotros esta Red ha sido importante para conseguir alianzas, financiación y apoyos que en otras partes no conseguimos”.

“La Red es una herramienta fundamental para nuestros ayuntamientos y para promover una agricultura sostenible porque a través de la Red se cohesionan políticas comunes de economía social y solidaria, de acceso a una alimentación adecuada de toda la población pensando en especialmente en las personas más vulnerables” añade la Alcaldesa de Godella, Teresa Bueno.

Actualmente la Red consta de 5 municipios con menos de 10.000 habitantes (Aínsa, Baztan, Deba, Navàs y Orduña/Urduña) y 4 (Cardedeu, Godella, Huétor-Vega y Meliana) entre 10.000-50.000 habitantes. En base al trabajo participativo realizado con estos municipios más pequeños, se ha creado un grupo de trabajo específico que ha establecido unas líneas prioritarias ya en marcha como el asesoramiento para facilitar los trabajos de secretaría-intervención en el desarrollo de políticas alimentarias locales, el empoderamiento de las producciones locales, la apuesta por emprendimiento desde lo rural (especialmente la transformación de las pequeñas producciones y la venta directa y en canales cortos) y el acceso a nuevas fuentes de financiación conjuntas junto con la generación de alianzas entre territorios y redes ya existentes.