Cajamar aboga en una jornada en Llíria por generar estrategias para mejorar la competitividad del sector productivo

El objetivo principal era generar estrategias conjuntas para mejorar la competitividad del sector productivo. Precisamente, esa búsqueda de un objetivo común fue el motor para que la Comunidad de Regantes de Llíria, la Cooperativa Vinícola, el Ayuntamiento, la Generalitat Valenciana y Cajamar se reunieran y plantearan diferentes soluciones que fortalezcan la rentabilidad del sector.

A lo largo de la jornada se puso en común la experiencia de quince ponentes y su punto de vista sobre las posibilidades de desarrollo y generación de valor en el sector agroalimentario, en el nuevo contexto de la transformación digital y la sociedad de la información y el conocimiento.

El análisis de las problemáticas es claro: los problemas estructurales derivados de la pérdida de rentabilidad, el abandono de los cultivos, la escasa movilidad de tierras y la insuficiente adaptación al mercado están limitando el crecimiento del sector productivo agroalimentario.

Los municipios de la comarca del Camp del Turia no son ajenos a estas dificultades y necesitan proyectos e iniciativas que hagan posible un futuro agrario rentable. En el caso de Llíria, se inició la reconversión varietal con la evolución de la cooperativa, la modernización de la Comunidad de Regantes y con el Ayuntamiento de la localidad, consciente de la necesidad de apostar por un mundo rural vivo.

Partiendo de problemáticas complejas, no valen las soluciones cortoplacistas. Por ello, se planteó una jornada donde además del análisis de la situación que vive hoy en día la comarca se propusiesen soluciones y alternativas reales.

En el primer bloque se expusieron las posibles alternativas que ofrece el cambio varietal y el potencial que encontramos al diversificar nuestros cultivos. El segundo bloque puso el acento en la necesidad de posicionar el producto hortofrutícola en el mercado. Se habló de la importancia de incorporar al discurso de venta de los productos agroalimentarios las demandas crecientes de los consumidores (mas allá de alimentos de alta calidad, se trata de incorporar una serie de valores éticos, de sostenibilidad, de imagen, de territorio...etc.). En el tercer bloque se plantearon formulas para reforzar las estructuras a través de modelos de negocio asociativos de gestión común de la tierra y así hacer frente a la fragmentación parcelaria.

Por último, la visión de las políticas públicas para el fortalecimiento de las estructuras agrarias fue aportada en la sesión de clausura por el Secretario Autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, donde se expuso la Ley de la Estructuras Agrarias de la CV recién aprobada.

A modo de síntesis, las acciones principales sobre la visión de futuro que se compartieron en la jornada son:

-La gestión comercial como la productiva deben estar articuladas y dirigidas por decisiones empresariales y técnicas.

-El posicionamiento del producto en el mercado debe formar parte de la estrategia productiva.

-Es clave potenciar las sinergias y articular esfuerzos con todos los agentes del territorio y del sector agroalimentario.

-¡Es necesario actuar ya! Y aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece la inversión en I+D+i para apostar por una agricultura innovadora.

Lorena Tudela Marco
Centro de Experiencias de Cajamar