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Abaratar el precio de la cesta de la compra pasa por reducir el consumo de energía en la producción de alimentos

El mundo rural es el actor fundamental para garantizar la seguridad alimentaria, custodiar el territorio y, en la coyuntura actual, mitigar la crisis energética. Estos son los retos que se abordarán en el V Congreso Nacional de Ingenieros Agrónomos, organizado por la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos (ANIA) y el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos (CGCOIA), que tendrá lugar del 26 al 28 de septiembre en la Llotja de Lleida (Avda. Tortosa 6).

En un contexto protagonizado por un incremento desmedido y generalizado de los precios, que ha agujereado los bolsillos de las rentas más bajas en el último año, la cita pone en relieve la función estratégica y fundamental que desempeña el ámbito rural para garantizar la seguridad alimentaria entre la población. Esto significa no solo proporcionar productos saludables para el bienestar de las personas, sino también asegurar la cantidad suficiente de alimentos, que sean próximos y accesibles para todos.

Así lo ha manifestado Mª Cruz Díaz Álvarez, presidenta de la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos (ANIA), en la rueda de prensa de presentación de la cita, y que también ha contado con la participación de Baldomero Segura García del Río, presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos (CGCOIA) y del COIAL, y Conxita Villar Mir, decana del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Cataluña.

“Muchos de los problemas que llevan copando las cabeceras de los medios de comunicación y constituyen las principales preocupaciones de la ciudadanía tienen su solución en el medio rural: el precio de la cesta de la compra, los incendios forestales, el despliegue de las energías renovables, la custodia del territorio y la biodiversidad y la lucha contra el cambio climático pasan por desplegar todas las herramientas tecnológicas de los que ahora dispone la ingeniería agronómica”, afirma Mª Cruz Díaz Álvarez, presidenta de ANIA.

Y añade: “Por ejemplo, si conseguimos minimizar el impacto energético en la producción de alimentos, conseguiremos reducir el coste de la cesta de la compra, reduciremos la huella ambiental de la producción y mejoraremos las rentas de los agricultores”, señala la presidenta de ANIA quien sentencia con una frase que se va a escuchar constantemente en el congreso: “El medio rural es clave para garantizar la seguridad alimentaria”.

Bajo el lema Soluciones de la ingeniería agronómica para el reto demográfico, el congreso reunirá a todos los agentes implicados en el desarrollo de la actividad agroalimentaria. Se darán cita centenares de ingenieros agrónomos, empresas, universidades, administraciones y directivos autonómicos para para exponer y debatir sobre los problemas a los que se enfrenta en este momento el sector y los retos del futuro.

Tendrán un papel protagonista el uso de las soluciones tecnológicas necesarias para optimizar procesos, integrar biosistemas y reducir el desperdicio alimentario. Además, en el complejo escenario que se está viviendo actualmente, seguro que el cambio climático, la gestión del agua y el acceso a las materias primas centrarán los debates de los especialistas. También se hablará de la despoblación rural como un problema social, ecológico y económico, exponiendo casos de éxito y propuestas para rentabilizar los servicios ambientales que se prestan o se pueden llegar a prestar desde el medio rural.

Los ingenieros agrónomos, impulsores de una agricultura sostenible, transversal e interconectada

Hoy más que nunca, la búsqueda de la eficiencia es un punto crítico dentro del sector agroalimentario. Los límites de nuestro planeta nos están obligando a gestionar los ecosistemas, la biodiversidad y los recursos naturales con criterios de economía circular, y para ello el papel de los ingenieros agrónomos es vital, porque son los responsables de conectar los biosistemas para producir alimentos de calidad de manera eficiente y sostenible.

Ya no solo se trata de producir alimentos, se trata de que la huella energética que han dejado los alimentos que tenemos en el plato de comida que nos vamos a comer hoy sea lo menor posible, y eso pasar por desplegar todas las opciones de economía circular, incrementar la eficiencia en la producción y, muy especialmente, reducir el desperdicio alimentario en todas las fases.

Su propuesta es desplegar una producción de alimentos eficiente, que incorpore la producción de energía y recursos, genere nuevas rentas por la prestación de servicios ambientales y que todos los insumos y energía empleados para la producción sean efectivos, es decir, que lleguen a nuestra mesa y no se queden por el camino.

La situación política y económica mundial está afectando de manera importante a la seguridad alimentaria. A nivel internacional ya se contemplan escenarios de carestía de alimentos para capas muy importantes de la población, situaciones que parecían vencidas asoman de forma preocupante fruto de la inestabilidad geopolítica, que ha derivado en crisis energética y por una coyuntura climática desfavorable para las producciones agrarias. Una tormenta perfecta con la que tienen que lidiar los ingenieros agrónomos y que sin duda será la protagonista.

El V Congreso Nacional de Ingenieros Agrónomos pretende presentar nuevas propuestas transversales aplicables a corto y medio plazo: un sistema agroalimentario digital, circular y colaborativo. Y en él participarán, además de un gran número de empresas, autoridades gubernamentales, políticas y técnicas de toda España, y también un representante de la FAO.

Web congreso: https://congresoagronomos.es/

Sobre la Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos

La Asociación de Ingenieros Agrónomos se creó en 1872 con la finalidad de defender los intereses de los técnicos agronómicos superiores españoles. En 1926 pasó a denominarse Asociación Nacional de Ingenieros Agrónomos (ANIA).

Integrada en el Instituto de Ingeniería de España, y en estrecha colaboración con el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos, tiene como misión fomentar el prestigio moral, social y técnico de sus asociados, colaborando con las administraciones públicas, para contribuir al progreso de las tecnologías vinculadas al ciclo total del sistema agroalimentario (industrias de insumos, producción agraria y ganadera, transformación, transporte y distribución) y a los procesos productivos desarrollados en el sector agroalimentario.

Entre sus fines destaca el de promover la formación y favorecer las enseñanzas técnicas y profesionales que permitan alcanzar a sus asociados el máximo nivel en su actividad profesional.

Uno de los medios con que cuenta ANIA para alcanzar sus fines es la organización y participación en congresos, jornadas, conferencias y en general todo tipo de actividades que fomenten el intercambio de conocimientos relacionados con la profesión de Ingeniero Agrónomo.

Sobre el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos (CGCOIA)

La Organización Colegial de Ingenieros Agrónomos está integrada por los Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos y por su Consejo General y actua al servicio del interés general de la sociedad y de sus colegiados mediante el ejercicio de las funciones y competencias que le son propias.

 

Los Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos son corporaciones de derecho público constituidas y reconocidas por el artículo 36 de la Constitución y reguladas por la Ley 2/1974, de 13 de febrero, de Colegios Profesionales e integradas por quienes ejercen la profesión regulada de ingeniero agrónomo.

 

Los Colegios Oficiales de Ingenieros Agrónomos tienen personalidad jurídica propia, sin ánimo de lucro y plena capacidad de obrar para el cumplimiento de sus fines. En su organización y funcionamiento gozan de plena autonomía.